Las monedas criptográficas del dragón de JPMorgan 🐉💸

He aquí que Tyler Winklevoss, Crypto Knight-errante de Gemini, ha llevado a X a denunciar la supuesta trama de JPMorgan para “matar” a las empresas de criptomonedas. Uno podría imaginarse a los abogados del banco que agudizan sus plumas como dragones que perfeccionan sus colmillos. 🐉

Este Ruckus sigue al informe de Bloomberg de que JPMorgan, el hechicero bancario más grandioso de Estados Unidos, ahora exige que FinTechs pague el peaje para echar un vistazo a los datos de los clientes. Un movimiento tan descarado que casi se podía escuchar la tintineo de las monedas de oro en una bóveda etiquetada como “codicia regulatoria”. 💰

Al cargar por el acceso a los datos bancarios (anteriormente gratuitos a través de plataformas de terceros como Plaid), JPMorgan busca estrangular el alma de las fintechs, las venas que alimentan las aplicaciones y los intercambios criptográficos por igual. Un esfuerzo noble, si el objetivo de uno es ahogar la innovación en la burocracia. 🚫

Winklevoss, siempre el profeta del oro digital, advierte que esta “tiranía alimentada por la tarifa” aplastará a Fintechs, aquellos héroes no reconocidos que le permiten rastrear su presupuesto o comprar Bitcoin sin un sacrificio de sangre. Incluso Gemini y Coinbase, los alquimistas modernos de Crypto, dependen de dichos servicios para convertir las esperanzas de los usuarios en activos digitales. 🔮

La regla de banca abierta, una vez una espada brillante para la libertad del consumidor, ahora se encuentra en el limbo legal mientras los bancos demandan a la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB) por atreverse a dejar que existan aplicaciones de terceros. En mayo, el CFPB declaró sabiamente la regla muerta, dejando a FinTechs para preguntarse si han estado jugando al ajedrez con un dragón. 🐉♟️

Los bancos, por supuesto, se quejan de la “carga regulatoria” de compartir datos. Una carga, se imagina, similar a pedirle a un vampiro que compartiera su ataúd. 🧛

Winklevoss, con la gravedad de un hombre que ha vendido NFT a un gato, llama a esta “captura regulatoria atroz”. Una frase tan rica en veneno burocrático, podría envenenar un pequeño pueblo. “Esto”, proclama, “mata la innovación, perjudica a los consumidores y es malo para Estados Unidos!” Una rara trinidad de problemas, servido con un lado de ironía. 😂

2025-07-20 12:03