Represión de las criptomonedas: ¡El puño de hierro de China ataca de nuevo! 😤💥

Los sombríos pasillos del banco central de China resonaron una vez más con el atronador decreto de la ortodoxia financiera: las monedas estables, esos pequeños demonios resbaladizos, han sido tildados de amenaza al orden sagrado de la economía. 🏦⚡

Un sábado triste, después de reunirse con otras doce agencias de rostro sombrío, el Banco Popular de China declaró -con toda la solemnidad de un cortejo fúnebre- que “la especulación con moneda virtual ha salido de las sombras”. ¡Ay qué horror! ¡La audacia! ¡La pura falta de respeto hacia el desprecio burocrático! 😱

“Las monedas virtuales”, sisearon, “no son dinero. Nunca lo serán. Son el equivalente financiero de un fideo empapado: inútil y un poco embarazoso”.

Ah, sí, la gran purga de 2021, cuando China, en un ataque de celo revolucionario, desterró el comercio de criptomonedas y la minería al gulag digital. ¡Había que aplastar el crimen! ¡La estabilidad financiera debía ser adorada! Y sin embargo… de alguna manera, la minería de Bitcoin todavía prospera como las cucarachas en una tienda de bolas de masa. 🥟💀

Stablecoins: los villanos de esta tragicomedia

The bank, ever vigilant against the specter of fun, singled out stablecoins-those sneaky pretenders-as particularly villainous. “They don’t even try

Y así, con la seriedad de mil padres decepcionados, el banco prometió “tomar medidas enérgicas persistentes” contra las criptomonedas, porque nada dice “estabilidad económica” como una buena caza de brujas a la antigua. 🔥🧙‍♂️

Trece agencias asintieron solemnemente, prometiendo “profundizar la coordinación” (léase: espiar más) y “mejorar el seguimiento” (léase: echar un vistazo a sus ventanas digitales). Mientras tanto, los mineros de Bitcoin -esos pequeños anarquistas obstinados- todavía representan el 14% de la minería mundial. Ups. 🤷‍♂️

Y no olvidemos a Hong Kong, ese hermano pequeño rebelde, que se atrevió a coquetear con las licencias de las monedas estables, sólo para ser rápidamente reprendido por Beijing. “¡No se permite diversión!” -gritaron los reguladores, cerrando la puerta de golpe. 🚪🔒

Así que aquí estamos de nuevo, queridos camaradas, otro capítulo de la interminable guerra de China contra el fantasma de Satoshi Nakamoto. ¿Ganarán? Probablemente no. ¿Seguirán intentándolo? Absolutamente. Porque nada dice más “utopía socialista” que prohibir cosas que la gente realmente quiere. ✊😆

2025-12-01 09:30