¿El rango existencial de Bitcoin? 🤯

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Una observación fugaz:

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  • Bitcoin, atrapado en una vacilación de diciembre, oscilando entre 85.000 y 90.000 dólares, una preocupación de lo más aburrida.
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  • Una jaula creada por uno mismo, reforzada por las ansiedades de quienes negocian con las sombras (opciones, naturalmente). Comprar donde baja, vender donde se atreve a subir. ¡Qué drama!
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  • Veintisiete mil millones de rumores sobre el potencial que expira en Deribit, la mayoría anhelando las alturas. ¿Quizás una brisa alcista?
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Al parecer, diciembre ha sido un mes de rígido cautiverio para Bitcoin, atado entre los cómodos límites de 85.000 y 90.000 dólares. Mientras tanto, los americanos juguetean con sus acciones y el oro alcanza sus olas de ambición. Una curiosa indiferencia, ¿no? Frustración entre los creyentes, una tensión palpable… todo ello derivado, como era de esperar, del laberíntico mundo de los derivados. Es como observar el paso de un pájaro enjaulado 🪶.

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Y ahora, esos mismos mecanismos que lo aprisionaron sugieren un escape tentativo: una inclinación hacia los reinos superiores. Una resolución alcista, hacia mediados de los 90.000 dólares, parece más… plausible. ¿Un descenso sostenido por debajo de los 85.000 dólares? Improbable, ¿no le parece? Carece de cierta… justicia poética.

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Estos contratos de “opciones” ofrecen el derecho a comprar o vender (¡pero nunca la obligación! ¡Qué instrumentos tan delicados!), influyendo en el mercado. Un delicado equilibrio. Si el precio sube, quienes tienen las opciones de compra se alegran. Si falla, los tenedores de opciones de venta obtendrán el beneficio. Una gran apuesta, de verdad. 🎲

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Del otro lado están los “escritores” de estos contratos, cargados con la responsabilidad de cumplir sus compromisos. Se dedican a las coberturas, una danza frenética en los mercados al contado y de futuros, todos guiados por fuerzas misteriosas: “gamma” y “delta”, las llaman. ¡Ah, la jerga! Es suficiente para hacer que uno anhele tiempos más simples… como contar piedras.

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‘Delta’ mide la sensibilidad del precio de una opción a las fluctuaciones de Bitcoin. “Gamma”, entonces, mide qué tan rápido cambia esa sensibilidad. Cuando la “gamma” es alta y se aferra firmemente al precio actual, los operadores se ven obligados a entrar en un ciclo implacable de compra y venta, suprimiendo cualquier apariencia de verdadera volatilidad. Una tarea de Sísifo, de verdad.

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Según un tal “David” (cuya sabiduría se comparte a través de los pronunciamientos digitales de “X”, un oráculo moderno, sin duda), una gran gama de “put” cercana a los 85.000 dólares actuó como una base firme, obligando a los operadores a adquirir Bitcoin durante cualquier lapso momentáneo. Al mismo tiempo, una fuerte gamma de “call” cercana a los 90.000 dólares sirvió como un techo invisible, lo que los impulsó a soltarse. Un ciclo que se perpetúa a sí mismo, nacido no de la creencia sino de la pura necesidad. ¡Qué mundo tan ridículo! 😂

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Ahora, con opciones por valor de 27 mil millones de dólares acercándose a su fecha de vencimiento el 26 de diciembre, esta influencia estabilizadora comienza a debilitarse, a medida que “gamma” y “delta” se desvanecen en el éter. Es todo tan… temporal.

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Esta expiración es de gran escala y se inclina hacia el optimismo. Más de la mitad de la congregación de Deribit se marcha, con una escasa proporción de 0,38 entre “ventas” y “compras” (¡casi tres llamadas por cada venta!). Y la mayoría de estas intenciones rondan precios entre 100.000 y 116.000 dólares: audaces, ¿no te parece?

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El “punto máximo de dolor”, el precio al que los compradores de opciones sufren la mayor pérdida y los vendedores (los distribuidores) obtienen las mayores ganancias, se sitúa en 96.000 dólares, lo que confirma aún más este sesgo alcista. Qué juego tan inteligente. 😈

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Además, la “volatilidad implícita” (la expectativa del mercado sobre futuras fluctuaciones) avanza cerca de un mínimo de un mes de 45, lo que implica que los operadores no anticipan ninguna turbulencia inmediata. O son felizmente ignorantes o simplemente son jugadores de póquer expertos. Quizás ambas cosas. 🤷

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¿El rango existencial de Bitcoin? 🤯¿El rango existencial de Bitcoin? 🤯
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Una observación fugaz:

  • Bitcoin, atrapado en una vacilación de diciembre, oscilando entre 85.000 y 90.000 dólares, una preocupación de lo más aburrida.
  • Una jaula creada por uno mismo, reforzada por las ansiedades de quienes negocian con las sombras (opciones, naturalmente). Comprar donde baja, vender donde se atreve a subir. ¡Qué drama!
  • Veintisiete mil millones de rumores sobre el potencial que expira en Deribit, la mayoría anhelando las alturas. ¿Quizás una brisa alcista?

Al parecer, diciembre ha sido un mes de rígido cautiverio para Bitcoin, atado entre los cómodos límites de 85.000 y 90.000 dólares. Mientras tanto, los americanos juguetean con sus acciones y el oro alcanza sus olas de ambición. Una curiosa indiferencia, ¿no? Frustración entre los creyentes, una tensión palpable… todo ello derivado, como era de esperar, del laberíntico mundo de los derivados. Es como observar el paso de un pájaro enjaulado 🪶.

Y ahora, esos mismos mecanismos que lo aprisionaron sugieren un escape tentativo: una inclinación hacia los reinos superiores. Una resolución alcista, hacia mediados de los 90.000 dólares, parece más… plausible. ¿Un descenso sostenido por debajo de los 85.000 dólares? Improbable, ¿no le parece? Carece de cierta… justicia poética.

Estos contratos de “opciones” ofrecen el derecho a comprar o vender (¡pero nunca la obligación! ¡Qué instrumentos tan delicados!), influyendo en el mercado. Un delicado equilibrio. Si el precio sube, quienes tienen las opciones de compra se alegran. Si falla, los tenedores de opciones de venta obtendrán el beneficio. Una gran apuesta, de verdad. 🎲

Del otro lado están los “escritores” de estos contratos, cargados con la responsabilidad de cumplir sus compromisos. Incursionan en la cobertura, una danza frenética en los mercados al contado y de futuros, todos guiados por fuerzas misteriosas: “gamma” y “delta”, las llaman. ¡Ah, la jerga! Es suficiente para hacer que uno anhele tiempos más simples… como contar piedras.

‘Delta’ mide la sensibilidad del precio de una opción a las fluctuaciones de Bitcoin. “Gamma”, entonces, mide qué tan rápido cambia esa sensibilidad. Cuando la “gamma” es alta y se aferra firmemente al precio actual, los operadores se ven obligados a entrar en un ciclo implacable de compra y venta, suprimiendo cualquier apariencia de verdadera volatilidad. Una tarea de Sísifo, de verdad.

Según un tal “David” (cuya sabiduría se comparte a través de los pronunciamientos digitales de “X”, un oráculo moderno, sin duda), una gran gama de “put” cercana a los 85.000 dólares actuó como una base firme, obligando a los operadores a adquirir Bitcoin durante cualquier lapso momentáneo. Al mismo tiempo, una fuerte gamma de “call” cercana a los 90.000 dólares sirvió como un techo invisible, lo que los impulsó a soltarse. Un ciclo que se perpetúa a sí mismo, nacido no de la creencia sino de la pura necesidad. ¡Qué mundo tan ridículo! 😂

Ahora, con opciones por valor de 27 mil millones de dólares acercándose a su fecha de vencimiento el 26 de diciembre, esta influencia estabilizadora comienza a debilitarse, a medida que ‘gamma’ y ‘delta’ se desvanecen en el éter. Es todo tan… temporal.

Esta expiración es de gran escala y se inclina hacia el optimismo. Más de la mitad de la congregación de Deribit se marcha, con una escasa proporción de 0,38 entre “ventas” y “compras” (¡casi tres llamadas por cada venta!). Y la mayoría de estas intenciones rondan precios entre 100.000 y 116.000 dólares: audaces, ¿no te parece?

El “punto máximo de dolor”, el precio al que los compradores de opciones sufren la mayor pérdida y los vendedores (los distribuidores) obtienen las mayores ganancias, se sitúa en 96.000 dólares, lo que confirma aún más este sesgo alcista. Qué juego tan inteligente. 😈

Además, la “volatilidad implícita” (la expectativa del mercado sobre futuras fluctuaciones) avanza cerca de un mínimo de un mes de 45, lo que implica que los operadores no anticipan ninguna turbulencia inmediata. O son felizmente ignorantes o simplemente son jugadores de póquer expertos. Quizás ambas cosas. 🤷

2025-12-24 13:10