RESEÑA: “Sting” (2024)
Kiah Roache-Turner utiliza hábilmente una de las fobias universales, las arañas, en su película «Sting». Este miedo, que trasciende los atributos físicos y las edades, es tan profundo que para muchas personas supera a otros miedos. En términos más simples, estamos hablando de aracnofobia, un miedo que ni siquiera mi familia, incluidas mi esposa y mi hija, pueden ignorar (no pondrán un pie en la habitación una vez que conozcan la trama de «Sting»). Como resultado, el trabajo de Roache-Turner provoca inmediatamente fuertes reacciones.