10 secuelas de terror que olvidaste que existían

Seamos claros: los villanos de terror verdaderamente icónicos pueden vivir indefinidamente, siempre y cuando sus películas sigan siendo rentables. Una vez que las ventas de entradas disminuyen, incluso los monstruos más famosos se desvanecen. Jason Voorhees y Freddy Krueger son excelentes ejemplos: sus historias terminaron cuando el dinero dejó de llegar. Es extraño, pero los números de taquilla esencialmente alimentan el poder de un monstruo. Sin esos ingresos, lo único que les queda son armas y un pasado.








