Confesiones de Kiyosaki sobre la crisis de efectivo: Bitcoin, oro y Bitcoin Payasos 🤡💰

Robert Kiyosaki, profeta de las sagas fiscales de los últimos tiempos y autor de ese tomo plagado de riquezas Padre rico, padre pobre, ha garabateado pensamientos apresurados a su rebaño de 2,8 millones de personas en X: ni Bitcoin ni oro escaparán de sus garras, incluso mientras los mercados se precipitan hacia el abismo como borrachos en un baile de máscaras.

“Las burbujas de todo están estallando”, entonó el sábado, un bardo de caos, y agregó que la verdadera causa del colapso no radica en la suerte o el karma sino en una “escasez global de efectivo”. Como si las arterias del mundo se hubieran constreñido y los fondos, todos dulces fondos, brotaran al vacío. “La causa de la caída de todos los mercados es que el mundo necesita dinero en efectivo”, explicó; porque, por supuesto, nada dice más “apocalipsis económico” que necesitar monedas sueltas para las cosas más pequeñas.

Kiyosaki, canalizando el fantasma de Lawrence Lepard, profetiza “La Gran Letra”: un diluvio de creación de moneda tan vasto que podría ahogar a un país pequeño. “El Bug Print está a punto de comenzar…” declaró, sin aliento, asegurándonos que el oro, la plata, Bitcoin y Ethereum brillarían más a medida que “el dinero falso colapsara”. ¿Una postura noble o las divagaciones de un hombre que alguna vez se benefició de los juegos de mesa?

Un club de flujo de caja para almas desesperadas

Si los mercados son invernales, el discurso de Kiyosaki sobre los “clubes de flujo de efectivo” es una tormenta de nieve debilitante. “Únanse a los clubes. Aprendan juntos”, instó, como si reunirse en las salas de juntas con el ceño fruncido pudiera burlar la inflación. Mientras tanto, el índice de miedo y codicia de Bitcoin cayó en picada a 16, una puntuación abismal que debe haber hecho sonrojar a Hester Prynne.

El fondo de Bitcoin: ¿un truco de salón de redes sociales?

Santiment, siempre un economista directo, se burla de los tweets que afirman que Bitcoin ha “tocado fondo”. Señalan el chiste favorito de la historia: el “suelo” siempre aparece después de que se cae. Justo cuando la caída de 95.000 dólares del viernes provocó un coro de “¡BIEN HECHO, MERCADO!”, señal del sombrío recordatorio de Santiment de que a los mercados les encanta el alboroto antes de la caída.

2025-11-15 13:49