El viaje salvaje de FET: ¡Fichas de IA, demandas y ganancias absurdas! 🤯

Conclusiones clave (o cómo los humanos pretenden comprender el caos)

¿Qué desencadenó el conflicto interno dentro de la Alianza de Superinteligencia Artificial?

Ah, sí: Fetch.ai, en un movimiento tan predecible como un cosaco borracho en una boda, arrastró a Ocean Protocol a los tribunales por presunto dumping de tokens y mentiras de gobernanza. Qué humano.

¿Cómo ha respondido el mercado a la demanda y a los acontecimientos recientes?

Como un campesino que acaba de descubrir que su vaca sabe bailar, los compradores se lanzaron contra FET, incrementándolo un 40% en medio del drama. Ésa es la lógica de los mercados, donde el sentido muere.

La Alianza de Superinteligencia Artificial [FET], ese gran experimento de unidad (o locura), ahora se parece menos a una coalición de genios y más a una pelea de taberna por el último pepinillo. SingularityNET, Fetch.ai y Ocean Protocol, alguna vez unidos en elevados ideales, ahora se arañan entre sí como gatos en un saco.

Fetch.ai versus Ocean Protocol: una demanda digna de una farsa

Fetch.ai, en un arrebato de celo litigioso, llevó a Ocean Protocol ante el Distrito Sur de Nueva York, acusándolos de (¡jadea!) afirmaciones de gobernanza engañosas y de deshacerse de fichas como un comerciante que descarga patatas podridas. Los demandantes afirman que Ocean convirtió 661 millones de tokens Ocean en FET y luego descargó 263 millones de ellos, haciendo que los precios cayeran como un borracho por una escalera.

¿Y adónde fueron a parar estas fichas? Pues, a las Islas Caimán, naturalmente, porque nada dice más “confiable” que trasladar activos a un paraíso fiscal tropical. 🌴

Compradores especulativos: los locos del mercado

A pesar de este circo, FET surgió como una liebre asustada. Los compradores, quizás confundiendo el caos con una oportunidad, se tragaron 545 millones de tokens, mientras que los vendedores se deshicieron de 493 millones, una ganancia neta de 52 millones, lo que demuestra una vez más que la codicia triunfa sobre la razón.

La actividad cambiaria reflejó este frenesí. El Spot Netflow de FET se hundió en territorio negativo (-$1,35 millones), lo que significa que los retiros superaron a los depósitos, una señal segura de que los comerciantes estaban acumulando tokens como avaros con un nuevo amor por el confeti digital.

¿Puede mantenerse el impulso? (Spoiler: Probablemente no)

FET, en una hazaña absurda, se disparó un 51% a 0,45 dólares antes de establecerse en 0,36 dólares, lo que sigue siendo una ganancia diaria del 40,7%, como si las leyes de la gravedad hubieran sido suspendidas para los comerciantes de criptomonedas. El RSI estocástico llegó a 100, gritando “sobrecompra” como un mercado en una borrachera de vodka.

Si esta locura continúa, FET podría recuperar EMA100 ($0,48) e incluso apuntar a EMA200 ($0,6). Pero si no logra mantenerse por encima de la EMA50 ($0,37), volverá a caer a la EMA20 ($0,28), como un borracho que vuelve a casa tras una noche de especulaciones imprudentes.

2025-11-08 16:11