Kurosawa Kiyoshi, el prolífico autor de género japonés, todavía está experimentando: “Mantengo los guiones al mínimo para permitir la interpretación”

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Kurosawa Kiyoshi, el prolífico autor de género japonés, todavía está experimentando: “Mantengo los guiones al mínimo para permitir la interpretación”

Mientras profundizo en el cautivador mundo de Kurosawa, un cineasta visionario que atraviesa sin esfuerzo los reinos de la realidad y el género, es evidente que su viaje ha sido moldeado por una amalgama de experiencias e influencias. Nacido y criado en Japón durante la era de las películas de 8 mm y las películas de explotación, los años de formación de Kurosawa estuvieron impregnados de una cultura de experimentación e innovación. Los desafíos que planteaba capturar sonido en estas primeras plataformas cinematográficas lo empujaron hacia el cine de género, una decisión que finalmente definiría su carrera.


A principios de este año, durante su aparición como invitado especial en los Asian Film Awards, el cineasta Kurosawa Kiyoshi expresó una postura decidida respecto de su trabajo, sus inspiraciones y la importancia de la reinvención continua. Medio año y numerosos premios después, sigue igualmente firme en su determinación.

El año pasado celebré mi 68 cumpleaños. No estoy seguro de que haya muchos directores de cine de mi edad que hayan dirigido dos películas en un solo año», afirmó Kurosawa en marzo.

Actualmente, uno podría entender si parecía estar cansado. En 2024, Kurosawa ha completado tres películas: «Chime», un mediometraje de terror, la nueva versión del thriller de venganza «Serpent’s Path» y la película de acción «Cloud», que fue elegida como la entrada de Japón a los Oscar. Antes de dirigirse a Tokio, completó una larga serie de compromisos con la prensa, discursos de aceptación y una clase magistral en el festival de Busan. Durante el Festival Internacional de Cine de Tokio de esta semana, impartirá otra clase magistral, esta vez en el marco del Programa de Intercambio de Estudiantes de Cine Asiático.

Parece que lo que mantiene a Kurosawa, que actualmente tiene 69 años, es su afán por aprovechar las oportunidades que le permitan seguir explorando en la pantalla, sin preocuparse demasiado por los detalles de producción o cuestiones financieras.

Kurosawa compartió con EbMaster que un productor le pidió que creara una película de terror de 45 minutos. Esto no fue para transmisión o lanzamiento cinematográfico. El productor le dio a Kurosawa total libertad creativa, excepto que quería algo único y diferente a todo lo anterior: extraño, bizarro y extraño, pero no vanguardista. Al encontrar la tarea intrigante, Kurosawa aceptó.

La película titulada «Chime», proyectada por primera vez en Berlín, es un enigma que invita a la reflexión y que un crítico comparó con el primer episodio de una próxima serie de televisión. Se centra en el progresivo deterioro mental de un instructor de cocina sereno y metódico, que se encuentra lidiando con un grupo de alumnos inquietantes y una vida familiar problemática en casa.

El encuadre es muy claro. Las intenciones son ambiguas y desconcertantes.

Como crítico de cine, recientemente tuve la oportunidad de ver «El camino de la serpiente», un apasionante thriller dramático que apareció por primera vez en los cines japoneses antes de aparecer en los festivales de cine de San Sebastián y Busan. Esta intensa producción es en realidad una nueva versión de la película de Kurosawa de 1998 que lleva el mismo nombre, pero esta vez ha sido reinventada en el panorama cinematográfico francés.

En una interacción casual, un productor francés de hace mucho tiempo me preguntó si podía rehacer una de mis películas, a lo que rápidamente respondí ‘El camino de la serpiente’. Al principio no se concretó, pero el año pasado volvió a acercarse y mencionó que los fondos estaban disponibles y que podíamos producirlo en Francia. Era una perspectiva fantástica y acepté rápidamente.» – Kurosawa

Una razón para rehacer la película fue un guión de mi amigo Takahashi Hiroshi, centrado en temas de venganza. Aunque está ambientada en el mundo Yakuza, su historia es universalmente aplicable. Sorprendentemente, el guión sigue siendo relevante incluso hoy. Sin embargo, cuando la produjimos en 1998, tenía un presupuesto mínimo y, debido a la solidez del guión, no podía reclamar la película como propia. Tenía muchas ganas de volver a visitar el proyecto, titulado ‘El camino de la serpiente’, y darle mi toque único.

La versión revisada elimina cualquier conexión con Yakuza y cambia el personaje principal de un hombre a una mujer afligida por la pérdida de su hijo. Esta alteración requirió una nueva conclusión y la inclusión de personajes adicionales.

En mi proceso creativo para «Cloud», estaba decidido a mantenerme alejado de los estereotipos comunes que se ven a menudo en las películas de acción japonesas, que con frecuencia se centran en gánsteres o asesinos en serie. En cambio, quería que un personaje más identificable tomara protagonismo, alguien que se encuentra en una situación violenta extraordinaria o inesperada. Para mí, la escena inicial no es una secuencia de acción; simplemente representa a una persona común y corriente que se enfrenta a una situación extrema. Este fue mi proceso de pensamiento expresado durante mi entrevista en el Festival Internacional de Cine de Busan.

En respuesta a una pregunta, aclaró que ‘Cloud’ podría haber parecido frío y distante, lo cual no era su intención. No pretendía transmitir ningún mensaje específico mientras hacía la película; en cambio, su objetivo principal era crear una representación realista. Sin embargo, resultó un desafío y hubo que emplear un método alternativo.

Aunque Kurosawa cuenta con una extensa obra, con 74 películas en su haber en Imdb y 15 programas de televisión a su nombre, le resultó difícil encontrar inversores para su proyecto de género de acción. Sin embargo, cuando el popular actor Suda Masaki se unió al equipo, la financiación se volvió más accesible.

El director Kurosawa aprecia a Suda, de 30 años, por algo más que asegurar la financiación de la película. «Necesitaba a alguien con un toque rudo», dijo Kurosawa, «y Suda puede mostrarse atractivo y vulgar de manera convincente». Además, elogió a Suda por su capacidad para comprender mi guión con una dirección mínima, ya que rara vez hacía preguntas durante el proceso de producción.

Kurosawa afirmó que sus guiones suelen ser minimalistas, lo que permite flexibilidad en el set. Rara vez proporciona descripciones detalladas de los lugares, ya que es posible que él mismo no esté familiarizado con ellos. En esencia, se podrían considerar sus guiones como incompletos. Sin embargo, rara vez altera el diálogo que escribe y sólo incluye cosas que comprende algo, prefiriendo experimentar personalmente elementos desconocidos en lugar de especular sobre ellos.

En Busan, varios oradores y entrevistadores se mostraron interesados ​​en catalogar a Kurosawa como un especialista en películas de género. Sin embargo, su respuesta sugirió tanto un rechazo como una aceptación de esta etiqueta.

En términos más simples, Kurosawa afirmó una vez que para él una película de género es simplemente cualquier película. En otra ocasión, elogió a los cineastas coreanos por crear más películas de género que sus pares japoneses, admitiendo un toque de envidia. En el escenario, mencionó esto con humor y agregó que los cineastas japoneses se han aventurado en áreas diferentes.

Compartió que en su juventud, nos concentramos en películas de 8 mm y capturar el sonido era todo un desafío. En consecuencia, hice varias películas mudas porque los diálogos debían ser mínimos. Esta simplicidad me llevó hacia las películas de género, explicó. Además, creció viendo ‘películas de explotación’ de los años 70 y 80, o como se las llama más apropiadamente hoy en día, ‘títulos de género’.

Hoy en día, en el Japón encontrarás dos categorías principales de cineastas. El primer grupo, como se puede imaginar, está formado por aquellos que atienden al mercado interno, centrándose principalmente en proyectos comercialmente viables. Luego hay una raza diferente, una que prioriza la expresión artística y el atractivo internacional. Incluso pueden buscar financiación en el extranjero. Kurosawa compartió esta perspectiva con EbMaster y lamentó la división entre estos grupos. Reflexionó: «Tal vez encarno una mezcla de ambos.

Por supuesto, Kurosawa es conocido por ser un pionero en las coproducciones cinematográficas japonesas internacionales y ha colaborado en el extranjero en al menos tres proyectos. En particular, su película titulada «Hasta los confines de la Tierra» fue creada en colaboración con el estudio Uzbekkino de Uzbekistán.

Desde mi punto de vista, Kurosawa aprecia el espíritu de innovación de sus compañeros creadores. Cuando me preguntaron sobre los jóvenes cineastas japoneses que tengo en gran estima, rápidamente reconocí a Ryusuke Hamaguchi, el cerebro detrás de «Drive My Car».

El estilo de Hamaguchi es bastante distinto y con frecuencia elige caminos únicos en la realización cinematográfica que difieren significativamente del mío. Él y yo conversamos ocasionalmente, pero rara vez discutimos nuestros respectivos trabajos.

2024-11-02 01:47