La zambullida diabólica de Bitcoin: ¿Última broma de 100.000 dólares? 😈⚡

Mercados

Qué saber:

  • ¡Ah, los caprichos del destino! Hace apenas tres semanas, nuestro hechicero de Standard Chartered, Geoff Kendrick, profetizó un gran ascenso a $135,000 – pero, por desgracia, la tormenta de caídas y recuperaciones miserables del 10 de octubre lo ha dejado dando vueltas, previendo ahora una caída “inevitable” por debajo de $100,000 para la voluble bestia bitcoinOl. ¡Cómo tiemblan los poderosos pronosticadores! 😂
  • He aquí los presagios: los flujos desde el becerro de oro hasta la quimera criptográfica y el ajuste cada vez mayor de la liquidez por parte de la Reserva Federal, todo apunta a una profecía hilarante. 🤡
  • Susurrado al viento: Esta caída podría ser su eterno adiós al bitcoin de menos de seis cifras, bromeó Kendrick, con una sonrisa como si estuviera vendiendo aceite de serpiente en la feria. Última oportunidad para los tontos, ¿eh? 😏

¡Oh, el gran circo de las criptomonedas! Ese calamitoso derrame del 10 de octubre, seguido de un rebote tan débil que no espantaría a una mosca, ha convertido los corazones alcistas en gelatina. Uno podría pensar que los demonios del mercado están organizando un baile de máscaras en el infierno, donde los sueños se desmoronan como pan duro. 🍂👻

Y nuestro pobre adivino Geoff Kendrick -el mismísimo jefe de la unidad de demonios digitales de Standard Chartered- hace apenas unas semanas juró por un cohete por 135.000 dólares con tanta seguridad como Pedro vio a Cristo. ¿Pero ahora? Está mirando su ETF de cristal y murmurando sobre un descenso “inevitable” por debajo de la sagrada marca de los 100.000 dólares. ¡Cómo traicionan las cartas del tarot a sus escrutadores! 🔮😉

En su misiva a los clientes crédulos del miércoles (pues el miércoles siempre parece el comienzo de una mala semana en finanzas), Kendrick lamentó que el máximo del 6 de octubre de 126.000 dólares -justo en el objetivo, claro está- se esfumó como el hechizo de una bruja atada por las maldiciones comerciales entre Estados Unidos y China. “La hoguera del ‘miedo a la guerra comercial’ del 10 de octubre”, garabateó, evidentemente canalizando su Nostradamus interior, “aplastó todas las esperanzas. Ahora bien, ¿hasta qué punto debe caer Bitcoin para desenterrar sus miserables cimientos?” Giros y vueltas, amigos míos, en esta farsa sin fin. 🤔🤣

¡Pero no os preocupéis, porque llegan buenas nuevas! Esta caída en picado por debajo de los 100.000 dólares será breve como una estrella fugaz, asegura Kendrick, burlándose de ella como la búsqueda de gangas definitiva, nunca repetida, para la virginidad de seis cifras del bitcoin. Oh, la dulce ironía de las eternas “últimas oportunidades”, porque en las criptomonedas, el tesoro del mañana es la broma de hoy. 💸😂

Tres presagios de la salvación, proclama con el fervor de un fanático: primero, las migraciones místicas de capital desde el antiguo ídolo del oro hasta nuestro criptofénix que cambia de forma. Una fusión dorada esta semana se sincronizó con un fugaz guiño de bitcoin, insinuando rotaciones celestiales. “Más señales de este tipo”, bromea Kendrick con un guiño, “y tal vez podamos encontrar un fondo para este caos”. ¡En verdad, la alquimia en su máxima expresión sarcástica! 🌟🥇

En segundo lugar, los ojos puestos en los hechiceros de la Reserva Federal: ¿detendrán su hechizo de ajuste cuantitativo? En medio de liquidez cada vez más ajustada que se aprieta como el corsé de una bruja, un respiro podría conjurar los vientos para la próxima levitación absurda de bitcoin. Magia macro, amigos; No parpadees o te perderás el remate. 🪄😜

Por último, aunque Kendrick niega incursiones en la magia técnica, señala el baile leal de bitcoin por encima de su sello móvil de 50 semanas desde principios de 2023, cuando se regodeaba en apenas 25.000 dólares. ¿Coincidencia? ¡No, un pacto con destinos fluctuantes! 📈👀

Recordemos su oráculo del 3 de octubre: Se avecina un cenit histórico, perspectivas de fin de año de 200.000 dólares, estimuladas por espectros de cierre del gobierno, brujerías del Tesoro y fugaces inundaciones de ETF. Sin embargo, la burla de la manifestación persiste. ¿Kendrick? Sin desanimarse, predica: cualquier caída por debajo de los 100.000 dólares no es más que un plato principal, no un apocalipsis. La codicia a largo plazo continúa, el sarcasmo intacto. ¡Tiren los dados, mortales, o mejor dicho, la cadena de bloques! 💥🙄

2025-10-22 18:22